In Pace Christi

Albertini Vittorio

Albertini Vittorio
Fecha de nacimiento : 20/06/1915
Lugar de nacimiento : Negrar/VR/Italia
Votos temporales : 07/10/1933
Votos perpetuos : 07/10/1938
Fecha de ordenación : 08/04/1939
Fecha de fallecimiento : 02/02/2011
Lugar de fallecimiento : Kampala/Uganda

El P. Vittorio Albertini nació en Negrar de Valpolicella, provincia de Verona, el 20 de junio de 1915. Cuando acabó la escuela elemental, le admitieron a frecuentar los cinco años siguientes en el Seminario de Verona. En septiembre de 1931 entró en el noviciado comboniano de Venegono Superior. Después de hacer la filosofía en el Seminario Arzobispal de Venegono Inferior, fue alumno de teología en el Ateneo Urbaniano de Roma; conseguida la licenciatura en Sagrada Teología, fue ordenado sacerdote el 8 de abril de 1939. Después de ocho años dedicados a la enseñanza de la Filosofía y Teología en el Instituto, al ministerio sacerdotal y a la promoción misionera en Italia, fue enviado a Inglaterra (1947) a aprender inglés. El P. Vittorio tenía que ir a Sudán a enseñar en el Seminario Mayor de Yei, pero las circunstancias no permitieron que el seminario fuese construido. Por eso los superiores lo dejaron en Inglaterra durante cuatro años, y lo encargaron del noviciado de Sunningdale como padre maestro.

Destinado a Uganda, tardó 25 días en llegar, vía mar, al puerto de Mombasa. El 25 de noviembre de 1951 llegó a Gulu, su primer destino, en el norte del país. Fue encargado de la enseñanza en el Seminario de Lacor, pero enseguida sintió el deseo de ejercitar también el ministerio pastoral en los alrededores.

Cuando salió hacia Uganda, el Superior General emérito, P. Antonio Vignato, le había recomendado ardientemente que buscara diligentemente todo lo que pudiera sobre dos catequistas, Daudi Okello y Jildo Irwa, asesinados en Paimol en 1918. Al P. Vignato le interesaba, sobre todo, conocer el motivo de su muerte. Después de haber interrogado a un gran número de testigos contemporáneos de la tragedia de Paimol, preparó la Recogida de testimonios que, debidamente traducidos y ponderados, se enviaron a Roma para ser examinados por un miembro de la Congregación para las Causas de beatificación y canonización. El parecer del perito fue muy favorable, tanto es así que animó a seguir con la búsqueda e indicó los puntos que se debían esclarecer. Por desgracia el P. Vittorio no pudo continuar este trabajo que, más tarde, se perdió. Años después la Recogida se encontró y cuando, en 1996, la causa de Daudi y Jildo se inició jurídicamente, se volvió a examinar y se incluyó en la “Positio super martyrio”, donde se cita decenas de veces con el título de Recogida Albertina.

En 1953 Mons. Giovanni Battista Cesana le pidió que se encargase de la Procura diocesana, cosa que hizo, añadiendo este trabajo a sus otras ocupaciones, la principal de todas, la enseñanza. En aquel tiempo todas las misiones del Norte de Uganda, incluidas las que hoy forman parte de las diócesis constituidas, Nilo Oeste, Lira y Karamoya, dependían de Gulu.

Colaboró a la vez en la pastoral de las distintas capillas dependientes de la catedral de Gulu. Ésta se encontraba en la periferia de la ciudad; el P. Vittorio enseguida se dio cuenta de que no se podía dilatar más la construcción de un centro de oración en el centro de la ciudad. Después de superar algunas dificultades, posponer las decisiones y “sudárselo”, finalmente fue edificada la iglesia en honor de la Bienaventurada Virgen del Rosario. El P. Vittorio se ocupó de esta comunidad durante otros cinco años.

Cuando se liberó del cargo de Procurador diocesano, retomó su ministerio en las distintas capillas. Cuando se fundaron los seminarios nacionales, a principio de los años setenta, se liberó también de la enseñanza en el seminario de Lacor y pudo ampliar su actividad pastoral. Se le encomendó la zona de Layibi, que se encontraba a tres kilómetros al sur de Gulu y donde ya existía un Colegio dirigido por los combonianos. Según los primeros planes de Mons. Cesana, la iglesia del Colegio de Layibi tenía que servir también para la población de los alrededores, pero la demanda de asistencia por parte de la gente de las aldeas circundantes creció de tal manera que se tuvo que programar la construcción de una iglesia aparte. En aquellos años las capillas crecían como hongos alrededor de la iglesia central de Layibi.

Recordando los tiempos de tensión y peligro tenidos al comienzo del mandato de Idi Amin Dada (1971-1979), el P. Vittorio escribía: “Todos hemos experimentado las amenazas y el peligro de ser matados. Personalmente, me he sentido amenazado de muerte por lo menos cinco veces. Una noche los rebeldes llegaron a la misión de Gulu: querían dinero y tuve que acompañarles a las distintas habitaciones, mientras uno de ellos me ponía el revólver en la cabeza. Dos veces me obligaron a arrodillarme, apuntándome con una pistola; dispararon pero no me hirieron. Durante una visita a la capilla de Angaba, me robaron todo. Otro día, mientras escribía los certificados de bautismo en la capilla, en presencia de mucha gente que enseguida desapareció, algunos hombres entraron con fusiles en ristre y robaron todo. Una vez, en uno de los períodos de mayor terror, poco después de las masacres de Pakwach, el P. Romanó vino a decirme: “¡Aquí nos matan a todos! Vámonos al hospital del doctor Corti”. Los superiores mandaron a todos los Combonianos una carta en la que sustancialmente decían que cada uno era libre de decidir si escapar o quedarse, pero nadie se movió. Idéntica situación se verificó en 2003, cuando se difundió la noticia de que Joseph Kony (cabecilla del LRA, Ejército de Resistencia del Señor) amenazaba con destruir las misiones católicas y matar a todos los misioneros y misioneras. Tampoco entonces se movió nadie”.

En 2009 el P. Vittorio se encontraba en el hospital de Lacor (Gulu) curándose. Después de una caída y la consiguiente ruptura del fémur, fue llevado urgentemente al hospital ortopédico de Kisubi, en Kampala. Allí murió el 2 de febrero de 2011 a la edad de noventa y cinco años. El cuerpo reposa en el cementerio de la misión de Gulu.